Un Carablanca extranjero y apolichinado, un Contraclown quejica y pesado y una Augusta burlona y danzarina se encuentran en la compañía del señor Bertotti, el gran director escénico, muy famoso en su país (por eso tuvo que huir de su país, ya lo conocían demasiado)
Juntos entrarán en el juego escénico, metiéndose en el cuento del Soldadito de Plomo de Hans Christian Andersen, que alguien dejó olvidado por allí, pero las pasiones propias se meterán en el cuento enredando a los seres imaginarios con los payasos. Y la bailarina, el soldado, el duende, la rata, los golfillos, la camarera y todos los demás personajes no volverán a ser los mismos...
Un cuenta cuentos que es una obra de payasos, unos payasos que cuentan un cuento y más cosas. Como en los juegos de los niños todo se mezcla, ¿Y no es eso el teatro en el fondo, un juego? ¿Y no tienen que jugar los payasos?
¿Pero no acaba muy mal, muy mal, fatal este cuento? ¿Y quién nos va a ayudar a acabarlo? ¿Usted amigo que nos está viendo?
Bailarina: Lily Kokonimó
Señor Bertotti: Choko
Soldadito: Chusepet
Dirigió la locura: Jordi Gómez
Texto: Hans Christian Andersen con una pequeña ayudita de Nebel :O)
